Vaya bucle vespertino el de esta segunda etapa del Rally de Turquía. Máxima exigencia en unas especiales repletas de inmensas piedras que ocasionaron más de un quebradero de cabeza, aunque se salvaron de ellos los Hyundai de Neuville-Gilsoul y Loeb-Elena. Los belgas lideran la quinta ronda del certamen con una ventaja superior al medio minuto sobre sus compañeros de equipo, que empatan a la décima en la general con Ogier-Ingrassia, afectados por problemas hidráulicos y un pinchazo.
Los acontecimientos se sucedieron en un increíblemente exigente segundo bucle de la jornada sabatina en el Rally de Turquía. El paso de los vehículos por las especiales durante la mañana convirtió las carreteras otomanas en unos temibles pedregales, jugando el azar un papel importante, sobre todo en los 31.79 kilómetros de ‘Yesilbelde’, aunque los problemas ahí costarían su tiempo en las posteriores ‘Datça’ y ‘Kizlan’.
La lucha por la primera plaza entre Ogier-Ingrassia y Neuville-Gilsoul cambió de dirección a favor de los belgas. Las mínimas diferencias de la sección matinal se alteraron por completo con los problemas hidráulicos padecidos por el Toyota #17, que afectaron en su mayoría a la caja de cambios. Pero ahí no quedó la cosa para los franceses, que también desllantarían un neumático, cediendo medio minuto ante la tripulación #11, que heredaba un liderato con el que arrancará a la definitiva etapa final.
No obstante, los trabajos de la dupla hexacampeona del mundo del mundo en el enlace siguiente les permitieron solventar medianamente el inconveniente mecánico, aunque nunca se despidieron de él de forma definitiva, concluyendo el día en el tercer lugar y empatados con los ocupantes del segundo, sus compatriotas Loeb-Elena, que otorgan a la firma surcoreana un doblete provisional. Sus dos vehículos se mantuvieron ajenos a las inclemencias turcas, gozando con esa resistencia Neuville-Gilsoul de una considerable ventaja al frente de la tabla.
Evans-Martin perdieron comba con sus predecesores a causa de un pinchazo y realizando el TC-8 con unos neumáticos completamente desgastados, al igual que sus vecinos en el garaje de Toyota Rovanperä-Halttunen, quintos por delante de sus paisanos Suninen-Lehtinen y Lappi-Ferm. Ambos integrantes de M-Sport Ford esperaban más de este fin de semana, pero su rendimiento les sitúa en lugares similares a los de Estonia. La clasificación de la categoría reina la cierran en tierra de nadie Greensmith-Edmondson y Loubet-Landais.
En WRC2 Tidemand-Barth dominan con un colchón de más de dos minutos con respecto a Fourmaux-Jamoul, víctimas de los contratiempos en el tramo rey del día.
En WRC3, Kajetanowicz-Szczepaniak incrementan su renta con sus rivales más próximos, los sudamericanos Bulacia-Der Ohannesian, a los 46.3» completando el podio momentáneo Fernández-García con su cauteloso planteamiento.
Me gusta esto:
Me gusta Cargando...
Relacionado