La pareja del DISA Copi Sport recuperó la corona con la segunda plaza obtenida en el XLVI Rally Orvecame Isla de Tenerife, primer evento en el que ceden la victoria al volante del Ford Fiesta R5 MKII que les ha catapultado de nuevo a la cima del automovilismo canario. Después de liderar la prueba tinerfeña con una actuación sin tacha, un retraso a la entrada de la penúltima especial y la consiguiente penalización les hacían situarse a espaldas de Lemes-Peñate, que se defendieron con firmeza en el último tramo y se adjudicaron el segundo triunfo en siete días con el Hyundai i20 R5.

De una tarde de trámite a un final de infarto. El resultado de la cuadragésimo sexta edición del Rally Orvecame Isla de Tenerife pasará a la historia como uno de los que más incertidumbre ha generado en el archipiélago canario. A falta de dos especiales para la conclusión del evento con base en Santa Cruz de Tenerife, las dos primeras plazas de la clasificación se invirtieron repentinamente gracias a un avispado copiloto proveniente del municipio de Santa Lucía de Tirajana.

La penúltima ronda del Campeonato de Canarias de Rallyes sobre Asfalto comenzaba con el vertiginoso descenso de Los Loros y sus 11.98 kilómetros, en los que se imponían contundentemente Enrique Cruz-Yeray Mújica con una velocidad promedio superior a los 100 km/h. Los líderes del certamen autonómico partían dispuestos a sentenciar el título y proseguir con la imbatibilidad del Ford Fiesta R5 MKII. Sin embargo, Yeray Lemes-Rogelio Peñate respondían con un scratch en el primer paso por Icor, registro al que respondían los integrantes del DISA Copi Sport en la también bajada del Porís de Abona, arribando a las asistencias con un liderato de 10.8» sobre la pareja de Hyundai Canarias.

En la tercera plaza marchaban Luis Monzón-José Carlos Déniz, pero los de Auto-Laca Competición tendrían que añadir a su acumulado veinte segundos por culpa de un retraso de 2′ al llegar al Control Horario 3A. Esa penalización permitía a Miguel Ángel Suárez-Daniel Sosa ascender al último peldaño del podio provisional después de lidiar durante toda la mañana con un Skoda Fabia R5 con acusado subviraje, al igual que suponía un duro varapalo a los satauteños para mantener sus opciones al título. Víctor Abreu-Luís Rodríguez completaban el top cinco en tierra de nadie.

Enrique Cruz-Yeray Mújica marcaron la pauta durante la mañana, acercándose al título especial a especial.

En el segundo bucle se repetían las cronometradas matinales, con el aliciente de los puntos extra del TC Plus, a repartir en Los Loros. Con las temperaturas ascendiendo en un día tan atípico como el año que estamos viviendo, escasos pilotos lograron rebajar sus marcas anteriores, pero lo que no cambió fue el dominio de Cruz-Mújica en la rampa de Arafo, adjudicándose los tres puntos tras establecer un registro inalcanzable para sus rivales. Lemes-Peñate, lejos de rendirse, contratacaron de nuevo en Icor y recortaron 3.3» a sus predecesores. No obstante, estos les devolvieron la jugada en el Porís de Abona, especial en la que se imponían Suárez-Sosa y fortalecían su lugar dentro del cuadro de honor frente a Monzón-Déniz.

Abreu-Rodríguez se perpetuaban detrás de los seguidores del ‘Mundialito Canario’, mientras tras de los de VL Motorsport se enzarzaban en una igualada pugna, tanto al crono como en monturas, los Mitsubishi Lancer Evo IX N+ de los experimentados Víctor Delgado-Nazer Ghuneim y los descubridores de la especialidad Javier Rodríguez-José Ángel González, con saldo favorable a la tripulación #12. Emma Falcón-Cándido Carrera, probando varios reglajes en el Citroën C3 R5, ocupaban el séptimo puesto, justo por delante de Manuel Mesa-Ariday Bonilla, Ángel Bello-Taghoter Vargas y Francisco Suárez-Néstor Gómez.

Con unas diferencias establecidas, la sección final se componía por el ‘Mickey Mouse’ de Candelaria (6.98 kilómetros) y las terceras pasadas por Icor y Porís de Abona. Con el atardecer de testigo, Monzón-Déniz sufrían una nueva sanción, en este caso de medio minuto por un retraso en el CH6B, aunque el motivo de la misma eran cambios de configuración del Citroën C3 R5, pensando ya en el ‘Islas Canarias’. A ese fin de semana del 26-28 de noviembre también trasladan su concentración Cruz-Mújica, hasta que un error rubricado en el carnet de ruta de los hombres que marchaban cómodamente en cabeza del decano del automovilismo tinerfeño tirase por la borda la renta de la que disfrutaban.

Sorprendentemente, el primer vehículo en tomar la salida del TC-8 era el Hyundai i20 R5 de Lemes-Peñate. ¿Dónde se encontraban Cruz-Mújica y Suárez-Sosa? Los navegantes del tinerfeño y del palmero, respectivamente, no se percataron de un error en los horarios de largada que sí corrigió Rogelio Peñate, un acierto con el que el devenir del rally se cargó de emoción e incertidumbre. En teoría, la organización aplicaría una penalización de 20» a los de Ford y otra de 10» a los de Skoda, pero ambos se lanzaron a por el último tramo sin conocer plenamente la decisión de los comisarios.

Si nos atañésemos al reglamento, Lemes-Peñate desbancarían de lo más alto de la tabla a unos Cruz-Mújica que necesitarían remontar cinco segundos para recuperar lo que se habían ganado en la carretera ejerciendo un dominio abrumador. Pero los enlaces también cuentan, y el costoso fallo que cometieron les obligó a exprimirse al máximo en los 8.08 kilómetros del Porís de Abona. Los pupilos de Fernando Capdevila se anotaron el mejor tiempo endosando a los defensores del entorchado autonómico… ¡cuatro segundos! El triunfo había recaído en manos de Lemes-Peñate, éxito que no celebraron hasta regresar a la capital de la isla, mas los mayores niveles de alegría eran exclusivos en las carpas del DISA Copi Sport que, junto a Cruz-Mújica y el novedoso Ford Fiesta R5 MKII, se coronaron como campeones virtuales en casa.

Yeray Lemes-Rogelio Peñate no cayeron en la trampa y se adjudicaron su segunda victoria consecutiva en el Rally Isla de Tenerife.

El pódium también se subieron Suárez-Sosa, evidenciando una progresión meritoria a los mandos de un coche checo que evolucionarán en la cita europea del calendario canario, en la que se batirán por la medalla de plata contra Monzón-Déniz, cuartos al término del ‘Isla de Tenerife’. Abreu-Rodríguez no abandonaron la quinta plaza en ningún momento con el Ford Fiesta R5 EVO2, antecediendo a los Mitsubishi del diamante en bruto que es Jorge Rodríguez, acompañado por José Ángel González. En su segundo rally, el prometedor conductor derrotó por apenas un segundo a Delgado-Ghuneim en una confrontación épica.

Mesa-Bonilla robaron la cartera a Falcón-Carrera en los metros finales, conformándose los de Citroën con la P9 y antecediendo a los R5 de Bello-Vargas y Suárez-Gómez. En 2RM, al principio la victoria pertenecía a Sergio Fuentes-José Abraham Báez sobre el novedoso Peugeot 208 Rally4, con el que superaron en dos décimas al 208 R2 de Giovanni Fariña-Carolina Fariña. Sin embargo, esta categoría no anduvo ajena a sobresaltos, y tras un aluvión de tarjetas amarillas en forma de penalizaciones, Miguel García-Juan Ignacio Machín escalaban hasta P1 con el Skoda Fabia Grupo A1.6.

En Regularidad Super Sport, Jesús Castro-Basilio Leandro encabezaron la clasificación con un Toyota Celica, escoltados por Ricardo Alonso-Ezequiel de la Paz (Ford Escort MK1 RS2000) y Óliver Díaz-Isabel Pérez (BMW 323i). Por lo que respecta a Sport, Óscar Álvarez-Marcos González se hicieron con los honores dirigiendo un BMW E21.

La clasificación final del XLVI Rally Orvecame Isla de Tenerife, disponible a un clic.

Fotos: Daniel Garcia Photography

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