Rally Safari: Neuville-Wydaeghe conservan y amplían diferencias

La dupla belga cambió por completo su planteamiento de una etapa a otra. Tras experimentar en la última especial de viernes los peligros que conllevaba el ritmo que imprimían en las pistas keniatas, Thierry Neuville-Martijn Wydaeghe redujeron una marcha y conservan la primera posición sin pinchazos mediante. La tripulación del Hyundai i20 Coupé WRC dispone de una renta de 57.4″ sobre sus rivales más próximos, que continúan siendo Takamoto Katsuta-Daniel Barritt (Toyota Yaris WRC). En la tercera plaza sí que hubo cambio en favor de Sébastien Ogier-Julien Ingrassia y su Toyota Yaris WRC.

Ayer, las profundas roderas constituyeron el principal quebradero de cabeza de los equipos. En la etapa de hoy se libraron de las especiales arenosas al desarrollarse estas sobre un firme más compacto, pero sí que se cruzaron con animales de la sábana africana que les obligaron en ciertos momentos a pisar el pedal del freno. Sin embargo, el mayor desafío de la jornada fue el aguacero de la última cronometrada, el segundo paso por los 31.04 kilómetros de ‘Sleeping Warrior’, que afectó a los que partían desde posiciones retrasadas en el orden de salida.

No obstante, la adversa meteorología resultó indiferente para el liderato de Thierry Neuville-Martijn Wydaeghe. Los belgas rodaron a una velocidad notablemente inferior a la que imprimieron en la exigente jornada anterior a sabiendas de los riesgos que esa estrategia entrañaba; sufrir de nuevo tres pinchazos no entraba en sus quinielas. A pesar de la cautela empleada, pero también requerida para alcanzar el éxito en el Rally Safari, los del Hyundai i20 Coupé WRC triplicaron su liderato sobre Takamoto Katsuta-Daniel Barritt, también precavidos a los mandos del Toyota Yaris WRC. Ambos ocupan puestos de privilegio y cumplirán sus cometidos con creces si finalizan mañana en ellas.

La tormenta que arreció en la anteriormente mentada ‘Sleeping Warrior 2’ pilló por sorpresa a los participantes y al parabrisas del Hyundai i20 Coupé WRC de Ott Tänak-Martin Järveoja. Instalados en la tercera plaza con un margen de seguridad superior al minuto, un cristal muy empañado obligó al piloto estonio a detenerse en plena especial para limpiarlo. El calefactor en el lado del navegante funcionaba, pero no en el del piloto, que dejó algún recado a los de Alzenau en los micrófonos de la transmisión en directo. Este percance les hacía perder un tiempo precioso y una P3 que, salvo debacle de Sébastien Ogier-Julien Ingrassia, no recuperarán.

Los del Toyota Yaris WRC apuntan a un resultado impensable cuando en la tercera cronometrada del viernes rompían la suspensión trasera derecha y arrastraban el problema en la siguiente. De permanecer sus compañeros Katsuta-Barritt justo por delante de los defensores del título, lo más seguro es que reciban órdenes de sus superiores para así incrementar en tres puntos el botín de la pareja gala. Mientras, los Ford Fiesta WRC de Gus Greensmith-Chris Patterson y Adrien Fourmaux-Reanaud Jamoul continúan evitando problemas, ocupando P5 y P6 en la clasificación general, respectivamente. A pesar de reintegrarse a la caravana en formato Súper Rally, Kalle Rovanperä-Jonne Halttunen (Toyota Yaris WRC) son octavos.

En WRC3, dominio mayúsculo del local Onkar Rai, al que acompaña dentro del Volkswagen Polo GTI R5 el británico Drew Sturrock. Con una ventaja que rebasa la barrera de los cinco minutos, el domingo se presenta como un día de trámite para los líderes de la división de apoyo, aunque en el Safari siempre hay que mantenerse en alerta. El segundo lugar provisional es para Karan Patel-Tauseef Khan (Ford Fiesta R5), beneficiados por el abandono por avería de los polacos Daniel Chwist-Kamil Heller (Ford Fiesta MKII Rally2).