El veterano piloto grancanario siente cierto grado de disconformidad con su arranque de temporada en el Campeonato Provincial de Las Palmas de Montaña. Problemas con el balance de su monoplaza le impiden igualar sus registros de cursos anteriores tanto en la ascensión de Montaña Alta como en la de Tejeda. «Parece que este no es mi año», afirma el vigente campeón autonómico de la Categoría 3. Todavía desconoce el origen de los problemas con las reacciones de la CM, aunque admite que cometió un error en la rampa guiense al cargar toda la responsabilidad en el mal funcionamiento del autoblocante.

José Luis Rodríguez lidera la Categoría 3 en el Campeonato Provincial de Las Palmas de Montaña. Sus victorias en las rampas de Montaña Alta y Tejeda le postulan como el principal y, hasta el momento, único candidato al título. Sin embargo, estos resultados no le generan el nivel de satisfacción suficiente. El veterano piloto grancanario asegura que siente una sensación de «disconformidad» a causa de unos problemas con el balance de su Silver Car S3. «Parece que este no es mi año», declara con resignación.

El triunfo con el que arrancó su campaña en la rampa de Santa María de Guía estuvo marcado por una avería en el autoblocante de su monoplaza. El actual campeón de Canarias de la modalidad no logró cumplir con el objetivo que se había fijado para ese evento, el de mejorar sus tiempos de ediciones anteriores. A la ascensión del pasado fin de semana partía con esa misma meta en su mente, pero la aparición de más contratiempos volvió a frustrar sus planes. «No sé qué pasa, algo raro ocurre», afirma.

‘El Puma’ sostiene que, en la cita organizada por Club Deportivo Azuatil a inicios de este mes de abril, marró al depositar toda la responsabilidad de sus cronos en el mal funcionamiento del autoblocante. «Como esa pieza no iba bien, le echábamos la culpa», relata. No obstante, Rodríguez también había enviado las suspensiones de su CM al fabricante para «ponerlas a punto». Ahora, sus sospechas giran alrededor de este componente. «Estamos poniendo los reglajes que teníamos el año pasado», detalla.

El análisis de José Luis concluye en que la Silver Car S3 «no se pega al suelo». Además, sus imprevisibles reacciones motivan que en unas partes sufra subviraje y en otras lamente la pérdida del tren posterior. «Hace unas cosas que nunca antes había hecho», comenta desconcertado por la situación. El satauteño afronta unos meses alejado de la competición, ya que no participará en Arucas debido a «compromisos familiares». La siguiente ronda en su calendario es la 19ª Subida Villa de Moya, prevista el 7 de octubre.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.